VIDAS MINADAS DIZ AÑOS, GERVASIO SÁNCHEZ

Hoy hace una semana que visité la exposición Vidas Minadas diez años del fotoperiodista Gervasio Sánchez. Pero en una semana no se me ha borrado ninguna imagen ni ninguna impresión de lo que vi y sentí mientras visitaba la exposición el pasado viernes por la tarde en el CCCB. Y es que Vidas Minadas es una exposición que no deja indiferente, que hace pensar.

Gervasio Sánchez recuperó en 2005 la historia de los protagonistas del proyecto 'Vidas Minadas' (en el que contó con el apoyo de Intermón Oxfam, Manos Unidas y Médicos sin Fronteras) que inició en 1995 coincidiendo con el tratado de Ottawa para la prohibición de las minas terrestres antipersona. En la exposición, donde a parte de fotos podemos ver un documental, se nos cuenta no sólo la evolución de los afectados por las minas, si no también cómo trabajó Gervasio Sánchez este proyecto, a parte de aleccionarnos sobre la problemática mundial de las minas antipersona.

Este proyecto, que ahora se convierte en una exposición itinerante, pretende concienciar a la clase política, a los medios de comunicación y, por supuesto, también a la población en general. La cuestión es muy peligrosa, porque las minas se llegaron a popularizar tanto que se usaron en muchas zonas a discreción y ahora no consta exactamente dónde hay zonas minadas. Por ello, el coste de localizar y desactivar una mina es de unos 770 euros. Según la ONU, harían falta 1.100 años y 30.000 millones de euros para erradicar los 167 millones de minas que hay plantadas en 78 países de todo el mundo.

El documental de la exposición es increible, porque pone cara a la tragedia de las minas. Se vive el drama de distintas personas de países donde el problema de las minas es muy extenso: Mozambique, Camboya, Bosnia... Además, Gervasio Sánchez narra su forma de trabajar, dice que está unos 10 días con cada familia y que hace muchas fotos, pero es cuando logra formar parte del ambiente cuando aparecen los momentos mágicos... momentos como el de esta foto de una mutilada Mozambiqueña con su hija de 2 años...

Más información sobre el proyecto Vidas Minadas.